Cambios... para una nueva época


Desde principios de 2019 y comenzando la elaboración de una nueva y definitiva serie de estudios para Orientación Existencial, Vocacional y Profesional, y de una serie de libros técnicos y divulgativos, fue que sentí la necesidad de llevar coherencia a la razón social de la consultora que dirijo y que fundé junto a mi compañera de estudios en el Ateneo AIG, Beatriz J. Díaz Yocou allá por el lejano 1990, un emprendimiento en su momento "extraño" para la época y que nos llevó no obstante a presentarlo en dos ocasiones en la EXPOTAN de Tandil y a dictar un curso básico para los licenciados en Criminalística de la Policía Provincial de Salta.


Hablo de coherencia, ya que desde hace varios años llevo adelante una cruzada reformadora en mi profesión para que se vaya abandonando paulatinamente el ambiguo término "Grafología" (con 150 años de historia a cuestas) por el de "Grafo-Psicología", mucho más certero y que coloca a esta disciplina científica "hermana" de la Psicología (ambas nacieron paralelamente). 


La Grafopsicología es por tanto, la rama de la Psicología que estudia, compara e interpreta los gestos gráficos (letra, firma, dibujos y demás imágenes, incluso mentales) en relación a la personalidad, conducta y variables emocionales del ser humano. 


Por su parte, insto a llamar "Grafo-Análisis" al conjunto de técnicas y metodologías con las cuales se observan, cotejan y deducen fenómenos proyectivos de la mente plasmados por ejemplo en un manuscrito cotidiano. De ahí la necesidad de cambiar el nombre de una consultora de desarrollo personal, vocacional y de recursos humanos sustentada en el ejercicio del grafoanálisis.


Por su parte, el nuevo logotipo pretende mostrar una imagen más moderna acorde a la filosofía de la consultora, abierta y atenta a los nuevos descubrimientos en las áreas del estudio del ser humano.